Adda. Fallo en el sistema operativo.

 

  

Luis se despertó relajado después de dormir plácidamente sus 8 horas. Otro día en el paraíso, pensó. La androide todavía dormía. La contempló. Tenía bellas facciones y formas perfectas, tal y como él las deseó, que se adivinaban debajo de la sábana. Cuarentón, con un buen sueldo de gerente, se había decidido por un modelo avanzado de robot. La androide, bautizada como Adda, era solícita, bien portada, hacía las tareas del hogar, barría, trapeaba, cocinaba, lavaba la ropa sucia y le daba de comer al gato. Por las noches, siempre que Luis quería, Adda lo complacía con especial empeño. Una feliz vida de casado, pues.

Los problemas empezaron cuando Luis se dio cuenta que la androide pasaba demasiado tiempo conectada a las redes. También dormía más de las 6 horas que decía el manual. A veces Adda prefería quedarse en la sala cuando Luis comía y eso le molestaba. Resuelto a terminar con los problemas, marcó el número telefónico de atención de la empresa fabricante, el sistema M.A.D.R.E., Monitoreo de Androides Diario, Regular y Esporádico, por sus iniciales.

-¿Bueno?

-¡Qué tal! Está usted llamando al sistema M.A.D.R.E del servicio de atención post venta de ADDA, Androides Dedicados de Atención Automatizada.

-Sí, gracias…

-Por ahora todos nuestros operadores se encuentran ocupados, ¿gusta acceder al sistema automático? Si es así, marque 1. Si no, marque 0 y cuelgue.

-…

-No hemos recibido su respuesta. Si gusta que se le atienda con el sistema automático marque 1. Si no, marque 0 y cuelgue.

Luis colgó, frustrado. Ya no le estaba gustando esa inversión que había hecho. Pero devolver el androide antes de un año se penalizaba con el 20 por ciento del costo total. Lo mejor era aguantar un poco más. A los pocos días intentó nuevamente comunicarse con la M.A.D.R.E. de ADDA y lo logró.

-Buen día, empresa ADDA. Le atiende Mary. ¿En qué le podemos ayudar hoy?

-Ah, gracias. Miré, compré recientemente una androide, versión 2032, para casa.

-Sí, déjeme ver. Lo tenemos en el registro. Adda, nivel Platinum, medidas 100-60-100, con baterías de ion litio-cadmio, 60 kilos, blanca, cabello rubio,1.70, servomotores asistidos por computadora, red neural suplementada con módulo de IA. Aja. ¿Cuál es el problema?

-Pues mire, Adda funciona bien, no tengo queja de eso, pero noto que ultimamente se queda muy pegada a la tele, a su celular, no me acompaña para cenar, a veces incluso no me contesta cuando le hablo y sólo me tuerce los ojos…

-¡Ah! Sí, hemos tenido algunos reportes similares. No se preocupe, es el sistema operativo de la red neural. Es un síntoma pasajero, que irá desapareciendo a medida que el algoritmo de inteligencia artificial sea alimentado adecuadamente…

-¿Qué?

-A ver, se lo pongo de forma sencilla. Usted debe interactuar más cálidamente con la androide…

-Pero señorita, no tengo tiempo, yo trabajo todo el día, de 9 a 8, inclusive los sábados, cuando llego a la casa sólo quiero descansar y que me atiendan…

-Uy señor, entonces va a estar difícil.

-¿Porqué?

- Lo que pasa es que el funcionamiento natural de la androide se logra entrenando el módulo de IA con trato humano de amabilidad, cariño, amor…

-No me joda, si por eso compré la androide, para que ella me tratara bien, como un rey, que en la noche siempre esté dispuesta… en fin, como una esposa, pues.

-Lo entiendo señor. Pero si leyó bien el contrato de compraventa, hay una clausula, la 325D, que dice que el comprador se obliga a otorgar un trato digno, humano y empático al androide.

-Sí… no… bueno, no leí todo el contrato.

-No se preocupe, lo entendemos. Lo que pasa es que el androide tiene una red neural biónica, es decir, circuitos electrónicos con células humanas. Y como tal, tiene derechos…

-¿Que qué?

-Pues sí. Lo dice el contrato en la cláusula 489C, que el androide tiene un circuito con células humanas y que tiene derechos que no pueden ser abandonados voluntariamente por el comprador.

-O sea… ¿que qué?

-Que si hay una queja por maltrato o intención de rechazo o abandono del androide, pues, hay obligaciones legales. Pero eso ya no lo vemos aquí en la compañía, sino en la CNDA.

-¿Que es…?

-La Comision Nacional de Derechos del Androide. No me diga que no ha oído hablar de ella.

-Pues sí, pero yo pensaba que era para defender al usuario de los androides…

-Ah… no, esa es la CNDUA, la Comisión Nacional de Derechos del Usuario de Androides. La CNDA es para proteger adecuadamente los derechos de las células humanas en los circuitos de los androides.

-No me diga que las células tienen derechos…

-Pues sí. ¿O es usted anti derechos?

-No, no, yo soy liberal, progresista, más de izquierda. Todos los derechos para todos.

-Efectivamente señor. Pues la solución es esperar que la inteligencia artificial haga lo suyo, que se acoplen mejor. Apenas tiene medio año con el modelo…

-¿Y usted me garantiza que las cosas van a mejorar?

-Bueno, tanto como garantizarle… pues no. Todo depende que el algoritmo trabaje óptimamente recibiendo la retroalimentación de emociones maduras, empáticas…

-Uff, pues eso va a estar dificil, porque yo trabajo…

-Sí, todo el día de 9 a 8, incluso los sábados. ¿Y qué quería? ¿Una esclava a la que no atienda y que lo reciba con los brazos abiertos todas las noches? ¡Mejor cómprese una muñeca inflable! Perdón señor, discúlpeme por favor.

-No hay problema. Bueno… pero es que costó un dineral…

-Sí, hay un procedimiento para la devolución del androide, pero es muy lento. Además, tiene penalización.

-Sí, es lo primero que revisé, 20 por ciento…

-Más una cuota de su sueldo del 15 por ciento durante el tiempo que nos tardemos en colocar al androide con otro usuario…

-¡Que qué! Eso no lo sabía…

-Aja, contrato de compraventa, cláusula 741F…

-O sea que me sale mejor mantenerla en casa…

-Pues sí, todo cuesta.

-Oiga y si me casara con una mujer real ¿cómo sería la cuestión?

-Uy, eso está más complicado. La cláusula 131B dice que eso está prohibido mientras no devuelva la unidad.

-O sea…

-Sí, sería acusado de bigamia.

-Pero…

-La cláusula es muy clara.

-Estoy jodido.

-Mire, yo le aconsejo que trate de arreglar las cosas con su unidad, que la trate con mayor consideración, con cariño; no ande de coscolino con las compañeras del trabajo, la androide tiene un sexto sentido que lo presiente…

-¿Cómo?

-Pues sí, las células femeninas del circuito neural…

-¡No me diga que son células de mujer!

-¡Claro! Es usted heterosexual ¿o no? ¿Qué quería? ¿Células de hombre?

-¡Ah, ahora entiendo! Es un fallo generalizado del sistema operativo… pues creo que lo mejor sería que no la conecte, para que su pila se agote y tan tan…

-Ni se le ocurra. Cláusula 13D: el propietario está obligado a suministrar la energía eléctrica para el mantenimiento del androide y por tanto, el usuario tiene prohibido desconectarlo e impedirle el goce de…

-Ya… sus derechos…

-Efectivamente.

-Gracias, señorita, veré cómo lo arreglo.

-De nada señor Luis. ¿Algo más en que le pueda ayudar? Si no, que pase un excelente día…

Luis colgó más desanimado que antes. Mientras empezaba a calcular cuánto era 20 por ciento más 15 por ciento, se acordó de lo que le decía su mamá: ¡fíjate bien cuando elijas pareja!

 

 

 

 

 

 

Imagen tomada de futuroelectrico.com

 

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